FESTIVAL MEDIEVAL PRIMERA EDICIÓN.
La vida es un pasatiempo.
Joshua Lederberg.
En el parque del desierto de los leones se realizó el festival medieval, su primera aparición en la ciudad de México. Rumbo a él, ya podías hacer un contacto maravilloso con la naturaleza entre árboles enormes y los diferentes sonidos que emitían las aves.

Con una temperatura baja por la temporada y la enorme cantidad de árboles que había, ya se podía apreciar el ex convento que ahí también se encuentra y los fanáticos ya con sus disfraces desde niños hasta personas adultas y el sonido del show que ya estaba en curso.

Entrando se podían apreciar las pancartas con un montón de cosas para vender, collares, disfraces, decoraciones con esta temática. No podía faltar la cantidad de personas que se encontraban ahí disfrazadas, tomando cerveza en un cuerno de toro, serpientes en el cuello, búhos en las manos, armaduras y espadas parecidas a esas que se ven en las películas.
Caminando en las pancartas ofrecían "pociones mágicas", ungüentos para ahuyentar a las brujas y por supuesto no podía faltar la comida que despedía un olor que abría el apetito de inmediato, podías escoger entre un gran filete de jabalí, ternera o cerdo.

Yendo al escenario un concurso de disfraces se llevaba a cabo y los participantes sin duda se notaba el esmero que ponían en ello, pues algunos daban su testimonio de su experiencia al hacerlos a mano y de cómo se las ingeniaron para hacerlos lo más parecidos, otros de otros países europeos asistían.
Una experiencia que te transporta a esa época medieval, incluyendo la naturaleza que en esos entonces era un factor importante y que para su primera edición fue sin duda un excelente trabajo, pues en si el lugar donde se realizó hablaba por sí solo.
La entrada costo $150.00 para adultos y $75.00 para niños, discapacitados y personas de la tercera edad.


Edith Badillo