El Alebrije

A las 9 de la mañana en punto mi compañero de vida me llevaba a un lugar inesperado...¡sí, una sorpresa! No sabía que esperar. Me sentía emocionada.
Llegamos como a la media hora y con la grata noticia que era un restaurante típico de Oaxaca, ¡Me encanta la comida tradicional! Y que mejor que ése estado para poder representar lo que somos en gastronomía y nuestra cultura. Lo fascinante es eso, cuando encuentras todo lo que existe en México deleitándote con los deliciosos sabores de esos platillos que dicen mucho de una región.
El restaurante tenía muchos colores llamativos y bonitos. Sillas coloridas de madera y bastante cómodas. Música oaxaqueña que atraía a los comensales, algo que no siempre es útil. Todo esto acompañado de un alebrije como imagen principal. Lo mejor fue la comida, esa mañana había un buffet exquisito, platillos que te hacen recordar en el paladar lo que es México a través de la gastronomía. Mole rojo, verde, negro, pipián, pollo en barbacoa, estofado de pollo y uno en particular que estaba preparado con ingredientes dulces, tales como manzana y pasas. La cocinera en seguida me dio a probar ese platillo principal que así lo catalogaron y sí, estaba sabroso, un poco agridulce, pero para mi gusto bien.
El trato entre todo el personal era de calidad, te hacían sentir en casa, en su casa.

Lo más increíble fue que podías pedir todo lo que quisieras y básicamente probar cada uno de los guisados. En verdad, muy recomendable y si te gusta probar cosas diferentes y conocer un poquito más a fondo lo que tenemos en nuestro país, El Alebrije es el lugar indicado para aquellos que buscan disfrutar de una buena comida.

Alo